Pese a que todavía faltan algunas semanas para que llegue de manera oficial el verano, ya hemos registrado varios episodios de temperaturas altas y se prevé que la época estival sea de intenso calor. Para combatirlo, en el interior de nuestra vivienda contamos con varias alternativas.
Hasta la fecha los equipos de aire acondicionado son la opción preferida por gran parte de la población, pero existen otros sistemas que también son eficaces, tienen un precio más económico y son más respetuosas con el medio ambiente.
Entre estas alternativas nos encontramos con los climatizadores evaporativos o enfriadores de aire. ¿Cómo funcionan? Básicamente, este tipo de sistema de climatización enfrían el aire gracias a la evaporación del agua.
A diferencia de los aires acondicionados, no es necesario ningún tipo de sistema que expulse aire o humedad al exterior. El agua pasa por un filtro y cuando el aire caliente pasa por el mismo, éste evapora el agua enfriando el aire de camino a ser expulsado. Algunos modelos permiten poner agua congelada, o hielo directamente, para que el agua pase todavía más fría por el filtro.
La capacidad de enfriamiento de los climatizadores evaporativos o enfriadores de aire depende mucho de la temperatura exterior y del nivel de humedad. Como medida estándar, se estima que pueden enfriar una estancia unos 3 o 4 grados de temperatura.
Si estás buscando un método para combatir el calor en casa, desde Vivienda Saludable te contamos qué hay que tener en cuenta acerca de los llamados enfriadores de aire. Tampoco hay que olvidar que antes de buscar soluciones que impliquen un gasto, debemos repasar y reforzar el aislamiento de la vivienda. Por ejemplo, la instalación de ventanas de altas prestaciones reduce las pérdidas energéticas hasta en un 70%, esto hace que el frío o el calor (según la época del año) se conserve en el interior de la vivienda y podamos hacer un menor uso de sistemas refrigerantes o de calefacción.
Principales características de los climatizadores evaporativos:
- Necesitan de una buena ventilación: a diferencia del aire acondicionado, en el que se intenta mantener la casa completamente cerrada para mantener el frío, los climatizadores evaporativos requieren de un flujo continuo de aire. De ahí que lo más indicado sea colocarlo cerca de una ventana para que se alimente de corrientes de aire nuevas.
- Pendientes del suministro de agua: este sistema necesita agua para funcionar y, si se trata de un modelo corriente, el depósito suele durar entre 6 y 12 horas. Por otro lado, si no utilizas el enfriador durante un largo tiempo, hay que vaciar y limpiar dicho depósito para evitar la proliferación de moho, hongos y bacterias. Por supuesto, también hay que sustituir los filtros del aparato cuando sea conveniente.
- Elegir el tamaño adecuado: todos los climatizadores evaporativos tienen unos metros cuadrados recomendados en función de su tamaño y capacidad. Es posible que necesites más de un enfriador si se trata de una estancia muy grande.
- Disponibilidad de varios modos: al margen de las diferentes velocidades que tiene un enfriador de aire, los hay con algunas funciones interesantes como “nocturna”, que minimiza el ruido que emite el aparato o “brisa”, que imita la sensación de corriente de aire. Algunos disponen también de «nebulizadores de agua», ideales en espacios abiertos (terrazas, jardines, etc). Las micropartículas de agua absorben calor del aire y proporcionan una sensación de frescor y bienestar inmediato. También suelen tener un temporizador, para dejar un tiempo de reposo el dispositivo. Esta opción es muy útil si no se desea dejar que el enfriador funcione toda la noche.
A favor de los enfriadores de aire:
- Bajo coste de instalación y mantenimiento: mientras que la instalación de un aire acondicionado requiere mano de obra y un tubo conectado al exterior, este tipo de aparato se pueden colocar en casi cualquier sitio y desplazarlos, ya que muchos tienen ruedas.
- Gran eficiencia energética y sostenibilidad: se estima que pueden utilizar hasta siete veces menos vatios de electricidad en comparación con un aparato de aire acondicionado. Mientras que los aparatos de aire acondicionado emiten gases dañinos, el enfriador evaporativo tan solo utiliza agua para disminuir la temperatura.
- Ahorro en la factura de la luz: al gastar mucha menos energía, la factura se reduce considerablemente
En contra:
- No tiene una gran eficiencia para espacios de gran tamaño.
- No es recomendable para zonas húmedas: un ambiente con demasiada humedad dificulta la capacidad del aire para absorber más humedad. Sin embargo, en las zonas más secas, el aire húmedo tendrá una mayor capacidad para reducir el calor y, por tanto, su efectividad será mucho mayor.
- No es conveniente usar en estancias cerradas, ya que precisa de puertas y ventanas abiertas para poder completar su proceso de renovación del aire.
En resumen, los climatizadores o enfriadores evaporativos son más económicos que otros sistemas para combatir el calor, además de consumir menos energía y ser más respetuosos con el medio ambiente.