Que nuestra casa huela bien en estas fechas navideñas es un tema que va más allá de la higiene, se trata de crear una atmósfera especial en el hogar, cálida y reconfortante. Para conseguirlo, desde Vivienda Saludable te recomendamos que pongas atención en los siguientes aspectos:
- La ventilación es clave: si quieres que el ambiente sea fresco, además de tener unos buenos hábitos de limpieza es fundamental ventilar todas las estancias a diario. No importa que sea invierno y haga frío, es básico que cada mañana ventilemos durante unos 10/15 minutos, para deshacernos de malos olores, eliminar ácaros y suprimir ese molesto “olor a cerrado”.
- Cuidado con los puntos sucios: existen lugares en nuestra casa propicios a los malos olores porque se acumula la suciedad rápidamente. En lo que respecta a los inodoros de los baños, utiliza limpiadores específicos para inodoros o prueba a colocar pastillas efervescentes o bolitas desodorantes. Para tener el cubo de basura a prueba de malos olores, cambia la bolsa regularmente y limpia el cubo con frecuencia. Además, el bicarbonato de sodio o el carbón vegetal te servirán para neutralizar olores. El bicarbonato te puede servir también para mantener limpias las tuberías. Presta atención al zapatero también, guardando los zapatos siempre limpios y secos.
- Déjate inspirar por la naturaleza: puedes usar y abusar de todo lo que te regala la naturaleza, como, por ejemplo: el musgo, las piñas navideñas, las ramas de pino o el acebo, con sus olores tan característicos. Con las ramas y las hojas puedes adornar una repisa, el pasamanos de la escalera o la mesa de fiesta. Además de decorar, pondrá una nota olfativa ideal para estar fechas. Laurel, eucalipto, escaramujos, romero y otras hierbas aromáticas también una opción ideal.
- Apuesta por el DIY (do it yourself): en Vivienda Saludable somos muy fans de apostar por el mundo de las manualidades. En esta ocasión, podemos confeccionar una guirnalda de frutas secas con rodajas de naranja, mandarina y limón. Una vez bien secos, anúdalos con palitos de canela, clavos de olor y ramas de romero para hacer la guirnalda. Y ¡voilá! Puedes colocarla en la entrada de tu casa o en el árbol de Navidad.
- La magia de las velas: son un clásico que nunca falla y hay una gran variedad de formas, tamaños y, especialmente, aromas. Aunque si lo que quieres es que tu casa huela a Navidad, déjate encandilar por aquellas que tengan olor a vainilla, canela o especias. Puedes encender varias velas de diferentes aromas de manera alterna, para que se produzca una combinación de olores típicos. Por supuesto, sé muy cuidadoso a la hora de usarlas y no las dejes desatendidas, ni cerca de materiales inflamables o cuando haya niños por en medio.
- Olor a Navidad: aunque no existe un olor a Navidad como tal, por mucho que haya fragancias que lo intenten imitar, podemos conseguir nuestra propia versión horneando un dulce, por ejemplo. Esa fragancia a bizcocho, a muffins, a galletas con forma de árbol, estrella o candy cane que no respeta barreras y se extiende por toda la casa. Huele a caramelo, a canela, a vainilla. Prueba a preparar unas cookies con infusión de manzana y canela, y añade un toque de vainilla.
Que tu casa huela genial en estas fiestas navideñas no consiste en poner un montón de fragancias artificiales en cada rincón, sino en dejar protagonismo a los aromas que tienen un gran significado para cada uno. Ya sea con unas pocas velas que desprendan ese olor especial que tanto nos gusta o dejando que los aromas de las recetas navideñas que hemos preparado con tanto esmero inunden toda las estancias.