Si recopilamos aquella famosa frase de “somos lo que comemos”, el lugar donde se gesta lo que somos la mayoría de las veces es la cocina de nuestros hogares. Es la estancia de la casa donde tiene lugar todo lo relacionado con los alimentos y es por eso que debemos cuidar mucho la higiene en la cocina.
Un enfoque muy peculiar de la higiene es el que se hace partiendo de la reducción de los residuos al mínimo y esto puede ir desde los desechos que se producen en la elaboración de las comidas hasta los propios residuos de los alimentos.
Reducción de residuos para mantener la higiene en la cocina
Los residuos orgánicos son probablemente los más delicados. Su acumulación da lugar a malos olores y favorece crecimiento de microorganismos y la aparición de insectos de todo tipo. Este tipo de basura, en especial los desechos de carne y de pescado, deben ser llevados al contenedor lo más rápido posible evitando así este tipo de problemas.
Ventilación para combatir malos olores
La acumulación de olores desagradables es algo muy frecuente en casi todas las cocinas. Para corregir esta situación lo mejor es prevenir su aparición y para ello lo más aconsejable es evitar la acumulación de basuras. Aun así, el propio proceso de elaboración de platos puede dar lugar a este problema.
En estos casos es aconsejable una buena ventilación, siempre previniendo la entrada de insectos con las correspondientes mosquiteras en puertas y ventanas. Además, la colocación de pequeños recipientes con cáscaras de limón o con vinagre en aquellos lugares más conflictivos, como microondas y neveras o incluso en lo alto de la encimera, ayuda a eliminar esos malos olores.
Productos ecológicos
Una tendencia muy actual se basa en el consumo de productos ecológicos, lo cual podría dar para un post completo por sí mismo. Los productos ecológicos están libres de pesticidas en toda su cadena de producción por lo que el consumo de este tipo de productos podría conllevar una reducción considerable de este tipo de residuos, de modo que entendiendo la higiene de la cocina como la reducción de los residuos, el consumo de productos ecológicos sería una buena herramienta para lograr dicho objetivo. Estos productos podemos encontrarlos ya en muchos establecimientos, generalmente en estantes bien identificados y con el sello de certificación ecológica en sus envases.
Envases
Haciendo referencia a los envases, otro punto fundamental de la higiene en la cocina es la producción de basura. Gran parte de esa basura procede de los envases de los alimentos que consumimos, por lo que es muy importante mantener el estado de conservación y de limpieza de dichos envases hasta su total eliminación, ya que puede ser foco de aparición de diversos tipos de insectos.
Lo ideal es separar los diferentes envases según sus tipos y llevarlos a los contenedores de reciclaje lo antes posible, para ello es una buena práctica que los recipientes de reciclaje del hogar sean de pequeño tamaño, para evitar que se acumulen durante demasiado tiempo.