Ya es Navidad y, además de los conocidos excesos económicos y gastronómicos que todos realizamos, tendríamos que añadir otro exceso que cometemos también: el exceso de gasto de energía. Nosotros mismos podemos decidir si queremos tener unas felices fiestas o, si en estos tiempos de crisis, queremos malgastar energía y dinero de tal manera que nos cueste recuperarnos en enero.
Si normalmente en todas las fechas del año gastamos más de lo que necesitamos, en esta época el consumo se dispara teniendo en cuenta todas las celebraciones, iluminación navideña y desplazamientos, sumado a que todo esto sucede en los meses más fríos del año.
Todo esto altera a tu cartera pero también a la Naturaleza. Piensa que cada euro que ahorres de un lado, el otro lo agradecerá. Es curioso, pero todo acto que beneficia a la Naturaleza siempre acaba siendo económico.
Por eso vienen muy bien algunos consejos navideños:
- Utiliza iluminación de bajo consumo, gastarás la mitad. Sustituye poco a poco tus decoraciones por otras más eficientes.
- No dejes todo el día el árbol y el Belén encendidos: acostúmbrate a encenderlos solo cuando estéis presentes.
- Manda felicitaciones por e-mail. Te modernizas, ahorras dinero y no gastas papel, la idea perfecta.
- A la hora de comprar juguetes, mejor sin pilas. Si compramos electrónica o electrodomésticos, asegúrate que están etiquetados (mejor A++) Pulsa aquí para ver las clases de etiquetas.
- Si salimos de viaje, quizá sea conveniente desactivar el interruptor general del hogar.
- Aunque deberíamos hacerlo todo el año, dosifiquemos el coche. Ahorraremos gasolina, y eso se traduce en menos emisiones de CO2 para la atmósfera.
- En la cocina también podemos aprender: descongela la nevera un día antes; usa la tapa de la olla para calentar antes; los lavavajillas y lavadora úsalos a carga completa.
- Procura ir a la compra con tus propias bolsas, son uno de los hábitos humanos que más perjudican al planeta.
- Al igual que con los Christmas por e-mail, una opción económica y ecológica es ¡comprar por Internet! Te ahorras desplazamientos, bolsas, tiempo y dinero. ¡Son todo ventajas!
Lo bueno de los problemas, es que tienen soluciones. Si estas soluciones las convirtiéramos en costumbres, viviríamos en un mundo mejor.
¡Feliz Navidad desde Vivienda Saludable!