Fácil de encontrar en cualquier supermercado, el vinagre blanco es un producto suave que ayuda a desinfectar varios tipos de superficies. Los usos del vinagre blanco en la limpieza no son ningún secreto, ya que su ácido acético atraviesa la suciedad y funciona como un desinfectante natural además de tener muchas otras propiedades.
Eso sí, lo que no es recomendable es mezclar vinagre con lejía o amoniaco, ya que el resultado puede resultar peligroso tanto para la piel como para los pulmones.
Usos del vinagre blanco en la limpieza
Muchas de nuestras abuelas, antes de que hubiera tanta variedad de limpiadores, sacaban mucho partido del vinagre blanco. Desde Vivienda Saludable te explicamos algunos de sus principales usos:
- Actúa como repelente de insectos. Si hay alguna área en la que se acumulen hormigas u otro tipo de bichos molestos, prueba a humedecer un disco de algodón con vinagre blanco y dejarlo en la zona.
- Limpieza del baño: es muy útil para deshacerse de los restos de cal que suele obstruir los grifos, especialmente en zonas donde el agua es especialmente dura. Quita la alcachofa de la ducha y sumérgela en un recipiente de agua con vinagre durante toda la noche. Al día siguiente, presentará un aspecto como nuevo.
También sirve para los restos de cal que suelen quedarse en los azulejos, puedes hacer una especie de pasta mezclando vinagre blanco, bicarbonato y agua. Lo aplicas durante unos minutos y lo aclaras con mucha agua.
- Poder desatascador: vierte tres cucharadas de bicarbonato sobre el desagüe -del fregadero o del lavabo- y media taza de vinagre blanco, notarás cómo comienza a hacer efervescencia. Espera unos 20 minutos y después vierte un litro de agua hirviendo.
- Limpieza de cristales y persianas: mezcla a partes iguales agua y vinagre e introduce esa mezcla en un envase con difusor o spray. Después de agitarla, pulverízala sobre los cristales. Con una goma limpiacristales o una bayeta de microfibra limpia la superficie, siempre en la misma dirección para evitar que queden rastros.
Ese mismo tipo de mezcla nos puede servir para la limpieza de las persianas, aunque también puedes añadir a la mezcla bicarbonato de sodio. Extiéndelo con un trapo o un cepillo y, después, aclara bien con agua.
- Higiene de los electrodomésticos. El vinagre blanco es un producto desodorizante, de manera que es perfecto para limpiar el lavavajillas y eliminar los malos olores que puede desprender. Pon una mezcla, a partes iguales, de agua y vinagre y añádelo en el compartimento en el que pones el abrillantador. Programa un lavado corto a alta temperatura, sin carga.
Si quieres hacer una limpieza en profundidad del horno, mete en un bol 10 cucharadas de bicarbonato, cuatro cucharadas de agua caliente y otras cuatro de vinagre blanco o de manzana (el resultado debe ser una especie de pasta). Espárcela por todas las superficies del horno, especialmente donde haya mucha grasa incrustada. Deja que actúe durante toda la noche y, a la mañana siguiente, prepara un pulverizador con vinagre y agua. Rocíalo por las superficies y frótalo todo con ayuda de una esponja. Por último, pásale un paño húmedo y retira todos los restos de producto.
- Limpiar la plancha: pasa un paño limpio y empapado en vinagre blanco caliente, con cuidado de no quemarte, por la base de la plancha hasta que salgan las manchas. Puedes agregar 2 o 3 cucharadas de sal o bicarbonato de sodio a la mezcla para hacerla más efectiva.
- Acción quitamanchas: para quitar las manchas de café o té, prueba a remojar la parte de la prenda en una solución hecha con un 1/3 de taza de vinagre y 2/3 de taza de agua. Luego, deja secar al sol y bien estirada.
Para las marcas en la madera, en muebles o parqué, emplea un paño de algodón o de lino con un poquito de vinagre blanco y frótala hasta que desaparezca.
Hay otras muchas más posibilidades de este producto pero, para todas y a la hora de limpiar, protege siempre tu piel con guantes para evitar irritaciones, resequedad y otras reacciones adversas.