El sector de la construcción busca desde hace años nuevos materiales con los que conseguir hogares confortables y menos dañinos para el medio ambiente tanto en la fase de montaje de los edificios como durante su vida útil. La paja se lleva usando durante décadas, aunque en España tiene menos tradición, y por ello se han alcanzado ya técnicas que la sitúan como un material idóneo para muchos tipos de construcciones.
Ventajas de la facha de paja
La principal característica por la que se escoge este material es por su alto aislamiento térmico y acústico. El aire en el interior de la paja y entre ellas frena el paso del frío a través del bloque.
Por otro lado, la forma y características de los bloques los convierten en piezas cómodas con los que ir construyendo los muros de nuestra vivienda. Los bloques se prensan muy bien para asegurar que son compactos. Esto se hace por dos razones: así propagarán menos el fuego y penetrará menos el agua y, además, aumentará la resistencia.
Los bloques de paja no deben mojarse, por lo que se protegen cubriéndolos con distintos materiales como arcilla, mortero o cal. Así de paso se aumenta la resistencia en caso de incendio. No obstante, su funcionamiento con el agua es bueno porque el material transpira y regula la humedad interior.
La forma de construcción con bloques de paja es muy sencilla: se van apilando sin más, es un material típico de la autoconstrucción. No obstante, hay que tener mucho cuidado, especialmente en lo que respecta al clima en que se piensa construir la vivienda, puesto que el riesgo de problemas por la humedad y los roedores deben ser exhaustivamente estudiados. Es muy recomendable consultar a profesionales antes de lanzarse con una construcción de paja.
Por último, la clave por la que la paja es uno de los materiales de moda por ser natural, biodegradable y de rápido crecimiento, es decir: no emitimos prácticamente CO2 en su extracción o fabricación, no es un residuo indestructible cuando deja de ser útil y tarda muy poco en crecer, por lo que es altamente renovable.
Los más curiosos podéis consultar la web de Red de Construcción con Paja donde encontraréis múltiples ejemplos de viviendas de este maravilloso material, legislación a seguir y las pruebas que se deben realizar para una de estas edificaciones.
Ejemplos de fachadas de paja
Ahora que sabemos más de este material, vamos a ver dos proyectos de lo más inspiradores:
Larixhaus
Esta vivienda lo tiene todo: se ha construido en 7 meses, con un precio nada excesivo (1200 €/m²), está hecha de paja y, encima ¡ha pasado las pruebas para obtener el certificado de casa pasiva!
Este es un claro ejemplo de uso de la paja como aislamiento, cubierto luego con esa preciosa madera. El muro cuenta con 40 centímetros de paja que permiten que el gasto energético de la vivienda sea irrisorio comparado con otra de las mismas características y peores materiales.
Cha Do Japonés
Se trata de un tipo de pequeño alojamiento para viajeros con mercado de productos locales y salón de té. La fachada diseñada de los arquitectos tiene dos capas. Por dentro, una cristalera de suelo a techo, por fuera, lo que podríamos llamar unas lamas de paja. Tal y como suena, los bloques de paja se colocan inclinados, sujetos por una estructura metálica que les permite girar para evitar la entrada del Sol cuando hace calor.
Los bloques se colocan solapados y siempre un poco inclinados para favorecer que el agua resbale hacia fuera y no se cuele por las juntas. Además, esta posición y el movimiento hacen que los bloques estén casi totalmente expuestos al aire, por lo que se secan rápidamente, alargando la vida del material.
Imágenes: Plataforma de Edificación Passivhaus | Casas de madera Valencia | archilovers (c) Takumi Ota