La causa principal de la contaminación en el hogar procede del tabaco y los efectos del humo en la vivienda. A través del humo que se exhala y se expulsa al fumar, se liberan los compuestos nocivos químicos del cigarrillo. Los efectos humo que se generan en el hogar afectan a la salud de la familia, que se ve expuesta a un entorno tóxico. El humo del tabaco ambiental se deposita en el mobiliario, las paredes, la ropa, lo utensilios del hogar y los juguetes de los nuestros hijos y mascotas.
La contaminación derivada del tabaco se mezcla, además, con el polvo y queda adherida a la superficie de los muebles de la vivienda durante meses, causando un grave riesgo en la salud, sobre todo en la de los miembros más vulnerables de la familia como son nuestros hijos, ancianos y mascotas. Las consecuencias pueden ser mucho peores de lo que se piensa, generando en ellos afecciones pulmonares, alergias y patologías respiratorias crónicas.
Pero sí está en tu mano poder reducir e incluso deshacerte por completo de esta fuente de contaminación y hacer de tu vivienda un lugar más seguro y saludable. Para ello, el remedio más eficaz para eliminar los efectos del humo en casa se basa en poner en tu hogar un purificador de aire de calidad y alta densidad, con el que se pueda eliminar el olor y los componentes químicos y nocivos que se desprenden al fumar y quedan adheridos al humo y al aire que circula en los espacios en los que se ha fumado. Es decir, que nos limpie el aire contaminado.
Aquí te desgranamos los principales tipos de purificadores de aire. Dada la amplia gama existente actualmente en el mercado y con el fin de orientarte un poco en las posibles dudas que puedan surgir al elegir tu modelo perfecto con el que poder eliminar el humo y el olor de cigarrillos de la vivienda, además del polvo y las bacterias que se puedan acumular:
Purificador de aire por Filtro HEPA
Tiene capacidad para atrapar el 99,97% de las partículas del aire. Elimina el polen, las esporas de moho, los ácaros del polvo y otros alérgenos. Este sistema es uno de los más recomendados por alergólogos y médicos dada su gran capacidad para eliminar la mayoría de los contaminantes del aire, incluso los de nivel microscópico. Pero debes tener en cuenta que los filtros HEPA no eliminan vapores, productos químicos, humo de cigarrillo, ni olores.
Sistema de Filtro de Carbón Activo
Los filtros de carbón activo tienen uno de los sistemas más absorbentes disponibles. Constan de pequeños poros absorbentes que reaccionan químicamente a los contaminantes a medida que pasan a través del filtro. Esto hace que los contaminantes queden atrapados en él. Resultan especialmente eficaces para eliminar el humo de los cigarrillos, los olores, los productos químicos y los gases, pero no eliminan el polvo ni los alérgenos, por lo que suelen utilizarse en combinación con otros filtros (esto es algo muy habitual).
Sistema de Filtro iónico
Está construido con un generador de íones negativos que capta el polvo y las partículas positivas que circulan por el aire. El inconveniente es que si tienes un problema con el polvo o el polen, un filtro iónico no es la mejor opción, porque no elimina las partículas por completo, pudiéndose quedar estas adheridas al suelo y las paredes. El principal problema de salud relacionado con purificadores de aire iónicos es el hecho de que producen ozono como subproducto. Cuando el ozono se inhala directamente por los pulmones, puede representar un riesgo para la salud.
Purificadores mediante luz ultravioleta
Este sistema utiliza la luz ultravioleta, que tiene radiación electromagnética, para destruir las bacterias y otros patógenos rompiendo los enlaces moleculares en su ADN. Un purificador de aire de luz ultravioleta funciona bien contra bacterias, virus, y el moho del aire. Sin embargo no eliminan el polvo, alérgenos o partículas sólidas del aire. Este tipo de purificadores son muy usados en entornos estériles como hospitales, cocinas, guarderías y laboratorios.
El rendimiento óptimo se alcanza cuando se utilizan en la vivienda varios filtros de aire al unísono. Así, podemos eliminar un espectro mucho más amplio de los contaminantes del aire como son los productos y vapores químicos, polvo, alérgenos, bacterias, gases, humo de los cigarrillos y olores.
No debes olvidar que aunque te hagas con un buen purificador de aire, y que aunque incluso combines varios filtros para su mayor efectividad, sigue siendo muy importante tener una correcta ventilación diaria en casa.