Si te has decidido a instalar un aparato de aire acondicionado el siguiente paso es decidir el tipo que va mejor con tu vivienda. A continuación te explicamos qué tipos existen y cuáles son sus ventajas y desventajas.
Aparatos de aire acondicionado
Multi split
Una unidad situada en el exterior de la casa alimenta hasta 2 o 3 aparatos de aire acondicionado situados en el interior. Las unidades interiores pueden ser de tipo mural, suelo-techo, casette o mixtas. El hueco necesario para unir la unidad exterior y la interior es muy pequeño. Un hueco de 10 cm x 10 cm, es suficiente.
Ventajas:
– Ideal para climatizar viviendas de más de 100 metros cuadrados, como casas unifamiliares.
– Permite regular la climatización de las estancias de manera independiente.
Desventajas:
– La instalación debe hacerla un profesional.
– Capacidad de refrigeración: Entre 1.700 y 5.000 frigorías/hora.
– Precio: entre 500 y 1.800 euros (2 uds.); entre 1.500 y 3.000 euros (3 uds.).
Split (partido)
Consta de una unidad interior y otra exterior. Están equipados con filtros purificadores de aire, desodorizantes, de prevención de humedad y demás sistemas de mejora de la calidad del aire. Pueden trabajar en modo de humidificación cuando la diferencia entre la temperatura del ambiente y la programada es reducida, más económico, o en modo refrigeración.
– Capacidad de refrigeración. Entre 1.000 y 8.000 frigorías, los más habituales para vivienda.
– Precio: entre 200 y 3.000 euros.
Climatizador de ventana
Unitario y compacto, se instala en un hueco de una ventana o muro exterior, quedando medio equipo fuera y el otro medio dentro.
Ventajas:
– Para viviendas donde no está permitida la colocación de unidades condensadoras en fachadas.
– Asegura la ventilación del local, ya que insufla aire fresco al interior y renueva el aire viciado.
Desventajas:
– La instalación debe hacerla un profesional. Poco estético. Es de los más ruidosos, aunque algunos de sus últimos modelos anuncian un bajo nivel sonoro.
– Capacidad de refrigeración: entre 1.500 y 5.000 frigorías/hora.
– Precio: entre 300 y 1.000 euros.
Split portatil
Tiene dos unidades, una exterior, tipo maleta, y otra interior. Se conectan a través de tuberías incorporadas a los equipos.
Ventajas:
– Ideales para acondicionar viviendas pequeñas, de alquiler o segunda residencia. Máximo 15-20 metros cuadrados.
– No requiere la intervención de un profesional para instalarlo. Se puede trasladar de una habitación a otra y acondicionar según las necesidades. No ocupa demasiado espacio.
Desventajas:
– Su movilidad depende de su peso y de la longitud del tubo. La ventana tiene que permanecer abierta para dejar paso al tubo flexible, lo que hace que se pierda parte de los beneficios de la refrigeración.
– Capacidad de refrigeración: entre 1.000 y 2.600 frigorías/hora.
– Precio: entre 300 y 1.000 euros.
Monobloc portátil
Es un aparato compacto que extrae el calor expulsando el aire caliente hacia el exterior a través de un tubo flexible. Un sencillo hueco en un cristal o en el cerco de una ventana sirven para colocar el tubo del conducto por el que se expulsa el calor.
Ventajas:
– Ideales para acondicionar viviendas pequeñas, de alquiler o segunda residencia. Máximo 15-20 metros cuadrados.
– No requiere la intervención de un profesional para instalarlo. Se puede trasladar de una habitación a otra. Es más cómodo y económico que el split portátil.
Desventajas:
– Es ruidoso porque el compresor está en la única unidad interior. Enfría menos que un split portátil, porque su potencia es inferior.
– Capacidad de refrigeración. Entre 1.500 y 3.000 frigorías/hora.
– Precio. Entre 300 y 600 euros