Los asistentes virtuales para tu hogar quieren ser, en un futuro cercano, la tecnología más usada en el día a día, después de los móviles. No en vano, las tres grandes empresas tecnológicas: Apple, Amazon y Google, apuestan fuerte por ellos y tienen como objetivo que haya uno en cada casa.
Te explicamos qué son, su funcionamiento y cómo pueden hacerte la vida más fácil.
Qué son los ayudantes virtuales para el hogar
La mayoría de asistentes virtuales para el hogar son altavoces inteligentes y conectados a la red, que se manejan mediante la voz. Así, escuchan tus órdenes y responden a ellas, interactuando contigo de manera natural.
Entre otras cosas, son capaces de contestar a preguntas buscando en Internet, ponerte la música que deseas, decirte las noticias o el tiempo, recordarte citas… Y lo más interesante, pretenden ser el centro de control de tu smart home. Conectados a la domótica de tu casa, pueden controlarla de manera inteligente, o bien lo puedes hacer tú mismo usando órdenes de voz.
Con un diseño moderno y elegante, aprovechan los avances en inteligencia artificial para interactuar contigo, o saber qué tienen que hacer en ciertas situaciones.
En un futuro cercano, serán capaces de conectarse a tu frigorífico, ver lo que falta y comprar automáticamente online lo que necesites, o concertar citas con tu peluquero, dentista, etc.
Algunos modelos más avanzados, como el Amazon Echo Show, también disponen de una pantalla que te muestra información de manera visual. Eso permite hacer videollamadas o controlar, a través de ese monitor, quién está en la puerta principal o qué ocurre en la habitación del bebé.
Actualmente, los ayudantes virtuales para tu hogar son habituales en países de habla inglesa. Sin embargo, algunos de ellos ya han llegado a España.
Cuáles son los ayudantes virtuales para el hogar más populares
Hay tres asistentes virtuales que dominan el mercado actualmente.
Google Home, versiones para todos los bolsillos
El Google Home es la apuesta de la empresa del buscador más famoso de Internet. A España han llegado recientemente el Google Home estándar y también su versión Mini.
Si estás acostumbrado a usar el asistente de Google en tu móvil, con este ayudante virtual para tu hogar te sentirás muy cómodo. Activado con el comando «Ok, Google», será capaz de buscarte la información que precises, poner música, controlar Youtube o Netflix en tu televisor (si lo ves mediante Chromecast) y mucho más…
Las recientes demostraciones de cómo está avanzando la inteligencia artificial del Asistente de Google están dejando con la boca abierta y prometen una interacción completamente natural, con la capacidad de concertar citas por teléfono o responder a nuestros comandos de voz como una persona.
Además, el Google Home Mini cuesta apenas 49 euros, haciéndolo la opción más asequible.
Apple Homepod, la opción de la gran manzana
Uno de los ayudantes virtuales para tu hogar más esperados es el Apple Homepod. Su apuesta es por un sonido espectacular de alta fidelidad y el poder de Siri, el asistente virtual de los iPhone, en su interior.
Todo lo que es capaz de hacer Siri, lo podrá hacer el Homepod: desde recordarte lo importante, hasta darte la información precisa, poner tu música… Además, el plan es que también se conecte a la domótica de tu casa inteligente y sea el centro de mando.
Todavía no sabemos cuándo estará en España o su precio final, pero es seguro que superará los 300 euros.
Amazon Echo, el ayudante virtual más veterano
Amazon fue la pionera en cuanto a asistentes virtuales con su Alexa, ahora conocida como Amazon Echo. Tiene multitud de versiones, incluyendo la Show, que incluye la pantalla de la que te hemos hablado.
Con unas prestaciones similares a sus competidores, su llegada a España es inminente y vendrá también en tres versiones, empezando por la más económica que rondará los 59 euros de salida.
Como ves, estas tres grandes empresas están preparando el futuro para que puedas controlar todo tu hogar inteligente por voz. Los avances que se están haciendo prometen un futuro fascinante y tener un ayudante virtual puede llegar a ser tan común como tener teléfono.