El otoño ya está aquí y no tiene porqué ser gris y aburrido. Este año viene cargado de nuevas ideas para que renueves fácilmente tu hogar, dándole un toque muy especial. Sin duda, la tendencia que está arrasando en todos los ámbitos, y más en el de la decoración, es el estilo vintage.
Vintage es un término inglés al que recurrimos para definir cualquier objeto antiguo, con un diseño artístico y de alta calidad; ese estilo decorativo con el que conseguirás que tu casa combine a la perfección lo moderno y lo tradicional. Inspirado en los años ‘30 y ‘40, aportará a las estancias de tu hogar un estilo muy elegante, con ese toque romántico que tanto nos gusta. Pero te estarás preguntando: ¿Y cómo lo consigo? No te preocupes aquí te damos cinco claves muy sencillas para decorar tu hogar con un estilo vintage:
- El blanco: Es el color base, junto con el blanco roto, y se combina con los accesorios y el mobiliario con colores más vivos, aunque lo ideal son los tonos pastel.
- Las flores: Los estampados florales son los protagonistas absolutos y se presentan en cortinas, alfombras, cojines, edredones… Indispensables en este tipo de estilo decorativo y en todas las estancias de la casa. Aportan frescura, color y romanticismo a la sala.
- Los muebles: Priman los afrancesados de tipo provenzal, con diseños tradicionales de formas curvilíneas, el conocido como estilo “Luis XV”, que evocan ambientes propios de la realeza. El capitoné es el mueble por antonomasia de la tapicería vintage.
- Los complementos y accesorios: Son la verdadera esencia para conseguir este estilo. Destacan los baúles desgastados, los variados marcos de fotos, las llamativas lámparas art decó, las magnificas vajillas de porcelana y los antiguos relojes de pared. Encontrarás tu objeto ideal en las numerosas ferias vintage que se celebran periódicamente por toda España.
- Los materiales principales: La madera, el mimbre y la forja son los más utilizados en este estilo decorativo.
Y como Zamora no se construyó en una hora, tómatelo con calma y ve incorporando poco a poco tu propia visión vintage del hogar. Y recuerda que la diferencia está en los pequeños detalles y en el buen gusto. ¿Te animas?