A la hora de determinar el precio de las ventanas se debe tener en cuenta varios aspectos: el perfil, el vidrio y los herrajes. Te explicamos lo que debes saber antes de acometer esta reforma en tu hogar.
Si habéis decidido cambiar los cerramientos de vuestro hogar o estáis pensando en la posibilidad de hacerlo, este post os ayudará a saber qué factores influyen en el precio de las ventanas, qué aspectos debéis tener en cuenta a la hora de comparar presupuestos y de qué manera podéis ahorrar dinero en la compra de vuestras nuevas ventanas sin que esto suponga una merma en la calidad de las mismas.
Cambiar las ventanas es una decisión importante que no se toma todos los días, ya que conlleva un notable desembolso económico y ciertas molestias (aunque no tantas como en principio pudiera parecer) mientras nos retiran las viejas ventanas y nos instalan las nuevas.
Como decíamos se trata de una decisión importante y por ello hay que meditarla lo suficiente, informarnos muy bien de qué hay en el mercado, de qué queremos/necesitamos nosotros y comparar varios presupuestos. Para las personas que nunca han acometido una reforma de este tipo o no están muy metidas en este mundillo, la ventana suele ser una gran desconocida. Por eso vamos a comenzar aclarando cuáles son las tres partes fundamentales que la componen y, por tanto, configuran su precio
El precio de las ventanas según el material
Los materiales más utilizados son el PVC, la madera y el aluminio (sin y con rotura de puente térmico ¹).
En términos absolutos el material más barato es el aluminio sin rotura de puente térmico, sin embargo a la larga es el más caro ya que es un material muy poco aislante, por lo que lo que nos hemos ahorrado en las ventanas, pronto lo gastaremos en calefacción. El aluminio con rotura de puente térmico tiene unas prestaciones mucho mejores que el básico, pero su precio también es mucho más elevado, llegando a superar casi siempre al PVC, sin llegar a ofrecer las mismas prestaciones.
El PVC, por su parte, tiene unas excepcionales cualidades aislantes, sobre todo a nivel de aislamiento térmico (al ser plástico, toda su composición actúa como “rotura puente térmico”) por lo que ahorran mucha energía. Además tiene una muy buena relación calidad-precio ya que la inversión inicial pronto se rentabiliza con un ahorro de hasta un 70% en calefacción y aire acondicionado Por eso es el material más utilizado en casi todos los países de Europa. Otra de sus ventajas es que apenas precisan mantenimiento.
No obstante no podemos pasar por alto que no todas las marcas son iguales y las prestaciones de los perfiles varían mucho de unas a otras, incluyendo la composición del PVC utilizado, el espesor de los perfiles, el refuerzo que lleven en el interior, etc. Merece la pena invertir un poco más de dinero en una buena marca cuya calidad sea reconocida y nos ofrezca garantías, que comprar unas ventanas más baratas y arrepentirnos de la decisión tomada cuando ya sea demasiado tarde. Porque no nos engañemos: no todas las ventanas son iguales y tampoco todas las ventanas de PVC son iguales.
En cuanto a la madera, al igual que el PVC es un material muy aislante, pero tiene dos inconvenientes principales: su alto precio y que requiere un minucioso mantenimiento. Además, para su producción es preciso, evidentemente, talar árboles.
El vidrio
Los hay de muchos tipos (bajo emisivos, acústicos…) y elegiremos uno u otro dependiendo de nuestras necesidades concretas. Lógicamente, cuantas más prestaciones tenga el vidrio (más espesor, mayor cámara de aire, etc.) más elevado será su precio. Sin embargo, si tenemos, por ejemplo, problemas de ruido (el vidrio influye mucho en el aislamiento acústico) nos merecerá la pena instalar un vidrio aislante aunque invirtamos más dinero en él, ya que acabaremos con este problema.
Los herrajes
Son los elementos metálicos que sirven para abrir y cerrar la ventana, tales como las bisagras, cierres, etc. Los hay de diferentes marcas aunque su precio no difiere demasiado. Las empresas que trabajan con las principales marcas de perfiles y de vidrios suelen trabajar también con buenas casas de herrajes.
Más cosas a tener en cuenta…
Una vez que tenemos claros los tres elementos que componen la ventana y cómo los queremos, según sean nuestras necesidades concretas, debemos “meternos en faena” y medir los huecos donde irán nuestras ventanas. Obviamente cuanto más estándar sea el hueco, más económico será el precio de las ventanas. Si éste tiene unas medidas poco comunes (muy grandes o muy pequeñas) o una forma rara, entonces el precio subirá.
Una vez que tengamos claro con qué hueco contamos, debemos decidir la forma de apertura que tendrá nuestra ventana o puerta. Las formas especiales (por ejemplo, la plegable o la guillotina) serán más caras. Por lo general las correderas son las más económicas (a no ser que sean correderas especiales, cuyo precio ya se incrementaría), pero también su capacidad de aislamiento es mucho menor que la de las practicables u oscilo-batientes, por lo que hay que valorar si este ahorro a inicial realmente nos va a compensar a medio y largo plazo.
Otro de los aspectos que repercute en el precio final de la ventana es el color, siendo más económicas aquéllas que lleven el color natural del perfil (por ejemplo el blanco en el caso del PVC o el plata en el caso del aluminio). El precio se incrementa cuando hay que dar color a los perfiles, ya sea mediante lacado o foliado ².
El montaje de las ventanas lógicamente también influirá en su precio final. Pero os recomendamos que no escatiméis en esto y contratéis la instalación a profesionales cualificados, ya que una buena ventana mal instalada dará tantos o más problemas como una mala ventana.
Finalmente, para que la inversión que supone el cambio de ventanas os resulte más llevadera, os recomendamos que os informéis de los Planes Renove de ventanas, ya que varias Comunidades Autónomas están dando ayudas a los ciudadanos para que cambien sus viejas ventanas “despilfarradoras de energía” por ventanas de calidad “ahorradoras de energía”. Del mismo modo, también os recomendamos que os informéis de las facilidades de financiación que muchos instaladores ofrecen. Y, sobre todo, que seáis concientes de que instalando unas ventanas de calidad, no estaremos gastando dinero, sino invirtiéndolo en calidad de vida y revalorizando nuestro hogar.
- El aluminio, al ser un metal, es un buen conductor térmico (el frío y el calor pasan a través de él). Por eso, para mejorar su capacidad aislante, se incorpora una pieza plástica en su interior que impide que traspase la temperatura. Esta pieza plástica es lo que se conoce como “rotura puente térmico”.
- El foliado consiste en una película plástica que va pegada sobre el perfil. Se utiliza, sobre todo para conseguir acabados madera.