El papel pintado es una excelente opción para dar un toque personal a nuestras paredes, reflejando nuestro estilo y gusto propios. Lejos quedaron los viejos papeles pintados de un solo material, frágil y con decoraciones anticuadas. Hoy podemos encontrar todo tipo de papel de pared, que se adapte exactamente a la identidad que queramos dar a cualquier parte de la casa.
Por eso, aquí te mostramos las diferentes opciones que tienes, te contamos cómo empapelar una pared paso a paso y también algunos trucos y curiosidades.
Tipos de papel pintado que podemos encontrar
Actualmente hay tres tipos principales de papel de pared:
- El papel tradicional. Cuyo componente principal es ese, el papel, junto a una base textil. Es el más delicado y es necesario encolar tanto la pared como el papel, lo que lo hace apto para sitios no muy concurridos y con poco desgaste.
- Papel textil y de vinilo (Tejido no Tejido). Esos son sus dos componentes principales y es el más indicado para zonas húmedas o transitadas, sometidas a desgaste como cocinas y baño, porque sí, puedes usar papel pintado para cocinas y baño. En esta variedad solo encolamos la pared al ponerlo.
- Vinilítico. Formado por papel y vinilo, también resiste bien la humedad y la luz del sol sin desgastarse. En este caso, solo tenemos que encolar el papel a la hora de colocarlo.
Cómo empapelar una pared paso a paso
Para que tu papel pintado quede impecable, ármate de cola, lápiz, un nivel, cepillo, espátula, rodillo y cuchilla, y sigue estos pasos.
Paso 1. Medir muy bien todo.
El proverbio de: “mejor medir dos veces para tener que cortar solo una”, se aplica aquí. Mide la habitación y mide el papel, tanto en el largo como en el ancho. Ten en cuenta que, a la hora de calcular el papel y colocarlo, habrás de dejar algo de sobrante por arriba y por abajo en las tiras. Siempre estamos a tiempo de cortar el sobrante, pero si no lo tenemos y falta, eso no tendrá arreglo.
Paso 2. Traza una línea vertical con lápiz que te sirva de guía para pegar el primer trozo de papel pintado.
Ese primer trozo servirá de referencia y ajuste para el resto de las tiras, por eso es importante dibujar esa línea que, a su vez, sea la guía para colocar perfectamente recto ese primer trozo. Asegúrate, usando un nivel, de que la línea está perfectamente trazada.
Paso 3. Encolar y pegar el primer trozo de papel bien alineado a la guía de lápiz
Según el tipo de papel pintado, habremos de encolar la pared, el papel en sí o ambas cosas. Este primer trozo es el más importante, así que deberemos tener cuidado y tomarnos el tiempo que precisemos para colocarlo perfectamente.
Paso 4. Quitar las burbujas e imperfecciones con un cepillo o trapo
El cual pasaremos sobre ese primer trozo de papel desde el centro del mismo hacia los extremos, a fin de quitar arrugas e imperfecciones.
Paso 5. Pegar el resto de tiras de papel pintado en la pared, usando el primero como guía.
A fin de nivelar motivos y dibujos, el primer trozo de papel pintado es el más importante y el que sirve de referencia para el resto. Lo ideal es no solapar una tira con otra, pero para que no se perciba hueco entre ellas, a veces se puede montar un poco una tira sobre otra (e incluso cortar después con mucho cuidado), dependiendo del grosor. En cada tira que peguemos, repetiremos también la maniobra de alisado y eliminación de arrugas con el cepillo tras la colocación.
Paso 6. Cortar los sobrantes
Con ayuda de una cuchilla y una espátula, eliminaremos esos sobrantes superior e inferior que hemos dejado, teniendo cuidado de hacerlo bien recto. Este es un paso importante en el que de nuevo nos tomaremos todo el tiempo que sea necesario, Hemos de dejarlo perfecto, ya que los descuidos en esta parte tienen difícil arreglo.
Ventajas de usar papel pintado en las paredes
Aunque el papel pintado les suena a muchos como algo del pasado, con los nuevos materiales tiene muchas ventajas sobre la pintura:
- Es resistente si elegimos variedades de vinilo y textiles.
- No tenemos que dar varias capas de pintura.
- Es más fácil de aplicar de lo que parece.
- Tenemos una enorme variedad que se adapta a cualquier estilo y permite personalizar más allá del simple color, con motivos y decoraciones.
- Es lavable y fácil de limpiar.
Algunos trucos y curiosidades sobre el papel pintado
Para empezar, hemos visto que se puede aplicar papel pintado para baños y para cocinas, e incluso puedes ponerlo sin necesidad de picar la pared y quitar los azulejos. Si los hay, debemos usar una masilla para cubrir dichos azulejos y dar una textura uniforme y adherente a la pared, que permita ser encolada.
El papel pintado no se puede colocar directamente sobre gotelé pero, si no quieres quitarlo (algo muy costoso), también puedes usar una pasta especial que se usa para cubrir y alisar.
Una vez tengas todo medido, compra papel de más. No todo va a salir a la primera y siempre es mejor que sobre, para tener de reserva en caso de desgarro y que haya que cubrirlo.
Como ves, el papel pintado tiene más ventajas y opciones de las que puede parecer a primera vista, y es una opción a considerar a la hora de darle a nuestro hogar ese toque especial tan nuestro.