Está muy bien toda esa tecnología que te permite conectarte con casi todo el mundo inter espacial, pero lo que ya no te hace tanta gracia es llenar tu casa de cables enredados. Nuestra propuesta: hacerlos “desaparecer” pero, ¿cómo?
1. Con tecnología
Las nuevas generaciones de aparatos se conectan entre sí gracias a tecnologías wireless que permiten conectarse o trabajar en red sin necesidad de cables. Echa un vistazo a las propiedades de cada aparato que te compres (impresora, tableta, teléfono, etcétera). Es muy probable que puedas interconectarlos usando la propia red wi-fi de tu casa o incluso el bluetooth. Te merecerá la pena dedicarle un ratito a esa configuración, a cambio de no tener cables colgando a la espera de ser conectados de vez en cuando. Lo que puede jugar en nuestra contra es esta idea es que cada marca tiene su política y que los sistemas de conexión muchas veces están limitados a aparatos que compartan fabricante o, al menos, sistema operativo.
2. Con arte
Y aquí todo cabe, basta con echarle imaginación:
- Si tienes muchos cables colgando, puedes hacer de ellos una melena de tu viejo poster de Bob Marley (o buscar una nueva inspiración, claro).
- O ponerles unas tachuelas que los sujetan a la pared, con soluciones que tienen gracia, más allá de la tachuela blanca “de toda la vida” y que pueden hasta dibujar un árbol en tu muro que contemplas cada día. Míra más ideas. Aunque a falta de ellas puedes dibujarlas tú.
- La idea de perforar una caja decorativa y meter tus cables dentro para que no queden a la vista es una de las que nos parecen más sencillas y aparentes. Hay quien prefiere organizar los cables dentro de rollos de papel higiénico. Son dos ideas sencillas y económicas.
- Una propuesta muy básica es recurrir a las rejillas que se suelen vender para la cocina (y los platos y los especieros) y colocarlas bajo tu escritorio, para meter ahí los cables y que no se vean por el suelo.
3. Con maña
Aquí ya es cuestión de que quieras ser un poco más pro, te vayas a una tienda de bricolaje y busques soluciones a medida. Las clásicas canaletas están bien para pegar los cables a la pared y llevarlos de manera recta hasta su enchufe correspondiente. Pero no pasan ningún examen en decoración e interiorismo, más bien al contrario. Te damos un par de soluciones más elaboradas, pero que dejan ese sabor a trabajo bien hecho, que podrían ser:
– Crear unos paneles tras el televisor o tras la mesa de trabajo, en las que uno introduce los cables ordenadamente, los oculta hasta que llegan a sus enchufes y luego tiene un bonito panel-cuadro-biombo que puede decorar a gusto propio.
– Menos laborioso, pero que también te llevará tu tiempo, es recurrir a una mini-valla blanca (como de casita norteamericana) en los zócalos para ocultar los antiestéticos cables. No está a la venta lista para instalar, pero puedes adquirir las vallas en tu tienda de jardinería y, con cinta de doble cara adherirla al zócalo.
COMENTARIOS
Hola! gracias por este post, no hay nada que deteste mas que los cables mal colocados jejej. Ahora tengo muchas ideas para disimularlos como la idea del papel higiénico que me pareció lo mas! Gracias